viernes, 24 de julio de 2009

A pues...





Los poderes del estado hondureño, todos, se conservan intactos y en plenas funciones. El Congreso, el Tribunal Supremo de Justicia, la Contraloría de la Republica, la Fiscalía General de Republica, además del poder Ejecutivo, que por acuerdo de un estado que se debe a su constitución y su sociedad civil, se vio en la necesidad de sustituir a un presidente, que no es mas que una persona en un enorme grupo de personas.




Las razones de su destitución son sobradamente conocidas. Las que más pesan son de índole moral. Corrupción, narco-complacencia (por decir lo menos), permisividad ante un poder ideológico y tangible extranjero de corte marxista e imperialista, y el profundo irrespeto hacia la sociedad civil.



El secretario general de la OEA ha dicho que “la comunidad internacional” repudia el golpe de estado que se ha perpetrado por los militares en Honduras. Debo hacer las siguientes aclaraciones:
- Las Fuerzas Armadas Hondureñas actuaron por una orden del Tribunal Supremo de Justicia, ante la negativa del presidente de atender a una decisión soberana de un poder del estado plenamente independiente y que tiene como obligación garantizar el respeto de la constitución nacional.

- Mal puede el secretario de la OEA promocionarse como voz autorizada de una comunidad internacional que se mueve por compromisos muy claros. Compromisos económicos y de complicidad. La izquierda internacional actúa como una cofradía, que ha logrado colocar en puestos importantes de los entes democráticos internacionales a individuos con la clara tarea de destruir el estamento y transformar el orden mundial en un “algo” que dañe los intereses de lo establecido, a beneficio de un no alineamiento que beneficie solo a un “otro” grupo. Esto no tendría nada de malo si se pudiese comprobar que este “otro” grupo viene a beneficio verdadero de la sociedad, y no para alimentar solamente el ego de resentimientos. Cuba y Venezuela distan mucho de ser ejemplo de beneficio para sus sociedades.

- Por otro lado, y solo por dar un ejemplo, el presidente de Costa Rica se ve en estos momentos comprometido en una dura tarea. No se debe olvidar que el es el “presidente de Costa Rica”, y tiene como principal compromiso el velar por el beneficio de su país. Mal puede hacer una labor de mediación con un equilibrio objetivo (aunque aplaudo su iniciativa e intención), cuando pertenece al grupo de países que recibe ayuda directa del petróleo venezolano, que es el país que ha generado toda esta situación. No se puede ser mediador cuando se le debe a una de las partes… Ya nos paso con el Presidente Gaviria…

Vemos como el ala aberrada de la izquierda representada claramente por el presidente de Venezuela (en este caso), mantiene a grupos de personas en las calles de Honduras, gritando, reclamando, en labores de activismo, y mas aun, irrespetando flagrantemente las decisiones soberanas de esa nación. También vemos como cientos de miles de personas salen a las calles a apoyar la paz, el cambio hacia mejor, la retoma de la vía democrática, y sin embargo el secretario de la OEA no se hace eco de esas millones de voces que están reclamando “DEJENNOS TRANQUILOS”.

El presidente destituido por los poderes del estado en Honduras, debería sentirse francamente orgulloso de su nacionalidad y no pisotearla por apetencias privadas. De eso se dio cuenta el país y por eso fue tomada la decisión que nadie rehúye asumir como responsabilidad en Honduras.

El ciudadano Mel Zelaya amenazó, el estado Hondureño advirtió. El dictador venezolano amenazó, el gobierno Hondureño advirtió. El secretario de la OEA amenazó, el gobierno Hondureño advirtió.

La comunidad internacional no tiene nada que decidir sobre Honduras, por lo menos no en la voz de individuos que no están representando a la inmensa mayoría de los ciudadanos, y menos a la inmensa mayoría de los hondureños, a quienes nadie ha consultado de forma seria… El presidente de Venezuela ya comienza a mirar a la creación de otro frente de atención regional para tapar con tierrita la bosta que produjo su mala intención, y así, entre indecisiones, pruebas fallidas, mucha agresividad y terror de estado, van transcurriendo los días, hasta que lleguemos a… donde sea...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deje su comentario aqui.